En los últimos años, las organizaciones se han
familiarizado cada vez más
con los servicios gestionados
o Managed Services, y
están recurriendo a ellos para administrar ciertas funciones de IT, como por ejemplo el email hosting, el
almacenamiento de datos,
la realización de
copias
de seguridad o la
recuperación de información, y
el monitoreo de redes.
De forma muy resumida, los Managed Services consisten en externalizar
la responsabilidad de mantener y anticipar la necesidad de una variedad de
procesos y funciones para mejorar las operaciones y reducir los gastos. Un MS o
servicio gestionado está diseñado para gestionar las operaciones diarias de sus
aplicaciones especializadas, lo que permite entre otras cosas que el
departamento interno de IT se centre tareas más estratégicas.
En
el pasado, el
ahorro de costess
era percibido
como el principal beneficio de los proveedores de servicios gestionados. Sin embargo, actualmente se valoran otros factores,
ya que los MS soluciona problemas como no lograr los objetivos por falta de
soporte técnico, las interrupciones en la conectividad, gastar el presupuesto
en aplicaciones que no dan el resultado esperado, o incluso la pérdida de
datos.
Los modelos de
MS han evolucionado con el
tiempo, y ahora son muy efectivos para negocios que:
- Requieren de una estructura IT eficiente para sus procesos y operatividad
diarios.
- No cuentan con personal suficientemente cualificado, o bien este no dispone
del suficiente tiempo para realizar el mantenimiento, las actualizaciones y las
reparaciones necesarias.
- Prefieren pagar una cuota fija mensual y contar un servicio de alta
calidad.
Así, los principales beneficios que los MS pueden
proporcionar a una empresa son los siguientes:
- Mejora en la seguridad, factor especialmente importante dado el auge de los
delitos cibernéticos.
- Enfoque proactivo de los problemas de IT. Se prevén y resuelven problemáticas antes de que pasen.
- Más productividad, al poder centrarnos en tareas de valor para la empresa.
- Acceso a nuevas tecnologías, y los sistemas están constantemente actualizados.
- Ahorro de costes con respecto al departamento de IT interno.
- Acceso a soluciones cloud.
- Acceso a soluciones remotas.
Como siempre remarcamos,
lo más importante es dimensionar adecuadamente las necesidades de la empresa
tanto actuales como futuras, para definir adecuadamente el proyecto.